Sentimos que, en esta empresa, estamos perdiendo la batalla de las ideas. Cada
cita electoral nos muestra una insuficiente participación en las mismas convirtiéndose el proceso en un ritual en lo que menos se valora son las diferentes propuestas sindicales. Decía Simon Weil que. «Nadie conserva sus derechos si no es capaz de ejercerlos en rigor»