Luego, todos (Altos, medios y bajos ejecutivos) se extrañan de que las “ENCUESTAS DE SATISFACIÓN DEL EMPLEADO” salgan como salen, y que eso de la CONCILIACION DE LA VIDA LABORAL Y PERSONAL nos suene a: ¡UTOPÍA!
Luego, todos (Altos, medios y bajos ejecutivos) se extrañan de que las “ENCUESTAS DE SATISFACIÓN DEL EMPLEADO” salgan como salen, y que eso de la CONCILIACION DE LA VIDA LABORAL Y PERSONAL nos suene a: ¡UTOPÍA!